Tal vez finalmente dejaste tu hábito regular de refrescos . (Si lo hiciste, ¡felicidades!)

Tal vez seas un niño de la década de 1990, y los refrescos de dieta han sido el único juego en la ciudad durante toda tu vida.

De cualquier manera, si se encuentra buscando refrescos de dieta de forma regular, probablemente se haya preguntado qué es exactamente lo que está poniendo en su cuerpo y cómo se compara con las cosas azucaradas.

“Cambiar de refresco regular a dietético puede ofrecer una reducción de calorías a corto plazo, pero su cuerpo no se dejará engañar por mucho tiempo”, dice la dietista registrada Susan Campbell, RD, LD. “La investigación sugiere que su cuerpo reacciona a ciertos alimentos no nutritivos, incluidos los edulcorantes artificiales en los refrescos de dieta, de maneras que en realidad pueden dañar su salud ”.

Aquí hay tres razones por las que Campbell dice que es importante deshacerse de la bebida dietética por completo.

Los refrescos de dieta se asocian con el aumento de peso

Algunas investigaciones sugieren que su cerebro reacciona a los edulcorantes artificiales de la misma manera que lo hace con los dulces azucarados . Ingerirlos con frecuencia puede aumentar su deseo de alimentos ricos en calorías, lo que lo pone en mayor riesgo de aumentar de peso.

Otro estudio encontró que las personas con sobrepeso u obesidad que cambiaron a refrescos de dieta probablemente consumieron más calorías en los alimentos que las personas con sobrepeso u obesidad que bebieron refrescos regulares. De hecho, aquellos que bebieron refrescos dietéticos tenían un IMC más alto que sus contrapartes.

Los refrescos dietéticos pueden causar confusión con la insulina

Su cerebro normalmente asocia “dulce” con calorías. En el ámbito de la fisiología humana, eso es algo bueno. Impulsa a su cuerpo a liberar insulina como acompañante del azúcar a las células para crear combustible. En el pasado, la gente asumía que este proceso no podía ocurrir cuando consumíamos edulcorantes artificiales porque las calorías no acompañan al sabor dulce.

Pero un estudio encontró que el proceso podría muy bien suceder de todos modos. En el estudio, las personas que consumieron un edulcorante artificial específico (sucralosa) tuvieron aumentos en los niveles de insulina y glucosa en sangre. Los aumentos frecuentes de insulina se han relacionado con la resistencia a la insulina y un mayor riesgo de diabetes tipo 2 .

Los refrescos de dieta pueden cambiar la reacción de su cerebro a la dulzura

Algunas investigaciones también sugieren que quienes beben refrescos de dieta tienen una mayor actividad en el área del cerebro asociada con el deseo de consumir alimentos con alto contenido de grasa y azúcar . Beber refrescos dietéticos parece alterar el centro de recompensas de percepción dulce de su cerebro. Esto significa que los refrescos de dieta podrían cambiar potencialmente la forma en que su cerebro reacciona a los antojos de alimentos ricos en calorías .

La soda azucarada también es mala

Con todos los problemas de salud en torno a las gaseosas dietéticas, ¿es mejor simplemente beber las regulares y azucaradas?

No tan rapido. Hay toneladas de datos que nos dicen que el azúcar agregada (incluso cuando es “real”) es mala para nuestra salud . Eso no significa que no puedas disfrutar de una delicia burbujeante en ocasiones especiales, pero ¿sabes lo que significa ?

Si su objetivo es una mejor salud, es hora de dejar el hábito de los refrescos por completo.

Y eso no es poca cosa. Muchas de estas bebidas no solo contienen cafeína, sino que también alteran el centro de recompensa de la sensación dulce de su cerebro. El material es adictivo, al igual que el azúcar .

Cómo dejar de beber refrescos de dieta

Si está listo para dejar los refrescos de dieta en el espejo retrovisor, aquí hay algunas cosas que puede hacer para facilitar la transición:

Pruebe alternativas a los refrescos de dieta

Sabor, cafeína, carbonatación: los refrescos dietéticos aportan mucho a la mesa. ¡La buena noticia es que también puede encontrar todas esas cosas en bebidas más saludables!

  • Obtenga su cafeína en otro lugar. Si tiene antojo de cafeína (con moderación) , es probable que esté mejor con café o té. ¡Simplemente no los llenes de crema y azúcar!
  • Añade sabor natural a tus bebidas. Si el sabor es lo que hizo que la gaseosa de dieta sea su bebida preferida, intente congelar frambuesas, pepino, menta, limón o lima en cubitos de hielo para agregar un toque de dulzura.
  • La carbonatación es clave. Muchos bebedores de refrescos de dieta disfrutan de la carbonatación de los refrescos incluso más que de la dulzura. Si ese es usted, intente poner fruta en agua mineral o agua con gas para recrear el atractivo burbujeante de la soda. También hay muchos refrescos con sabor y aguas con gas en el mercado que funcionan bien como una alternativa a los refrescos de dieta.
  • Probar cosas nuevas. Hay muchas bebidas alternativas por ahí. ¿ Has probado la kombucha ? ¿ Agua de coco ? ¡Incluso puedes obtener bebidas carbonatadas de vinagre de sidra de manzana en estos días! Solo asegúrese de revisar los ingredientes antes de brindar por su nueva vida sin refrescos.

Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar

  • Evite tener demasiada hambre. ¿Eres del tipo que se salta el desayuno? ¿Te apegas a tres comidas completas al día? Eso no lo prepara para el éxito porque lo hace más propenso a desear algo dulce durante el día.
  • Distráete. Si de repente siente la necesidad de tomar un refresco, responda haciendo algo que no sea beber refresco. Bebe un vaso de agua : Es posible que solo tengas sed. Da un paseo de 10 minutos. Llama a ese amigo con el que sigues queriendo ponerte al día. Lo más probable es que ese anhelo vaya a la deriva hacia el fondo de tu mente y eventualmente desaparezca.
  • Planifique en consecuencia. Asegúrese de llevar una alternativa a los refrescos a la parrillada del vecindario. Tenga agua fría o té helado esperándolo en el refrigerador, para que sea más fácil tomar una decisión saludable al final de un día ajetreado. Anticiparse a los antojos y planificar con anticipación puede hacer que enfrentarlos sea menos agotador.

La línea de fondo

Las compañías de refrescos han presentado durante mucho tiempo los refrescos de dieta como una alternativa saludable a sus bebidas con azúcar, pero eso no es médicamente exacto. Los refrescos de dieta son igual de malos, pero son igual de malos de una manera ligeramente diferente. Están asociados con el aumento de peso, la confusión con la insulina e incluso pueden cambiar la forma en que su cerebro responde a los dulces en general.

Dejar un hábito nunca es fácil, y los refrescos de todo tipo pueden ser adictivos. Pero los expertos dicen que eliminar las gaseosas por completo de su dieta puede tener efectos profundos tanto en su peso como en su salud.

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